Con hasta mil meteoritos por hora, la NASA anunció una sorpresiva lluvia de estrellas que podría ser la ‘más poderosa en generaciones’, por la desintegración del cometa SW3.
Según anunció la NASA, a partir de esta noche podría desatarse la ‘tormenta de meteoros más poderosa en generaciones’, aunque, no obstante, también destacó que no existe absoluta seguridad de que ocurra.
El anuncio de la agencia espacial estadounidense detalló que este evento, único en su tipo si llegara a ocurrir, está supeditado a que los escombros del cometa 73P/Schwassmann-Wachmann 3 alcancen la trayectoria terrestre, algo que no es posible asegurar.
Así las cosas, se trata de un auténtico «todo o nada» astronómico que podría dar lugar a un fenómeno sin igual, o a una mera quimera, dependiendo de la coincidencia entre el trayecto de la Tierra y la parte más gruesa del fragmento del cometa que está creando los escombros.
Tau Hércules con buen pronóstico
La lluvia de estrellas Tau Hércules recibe su nombre de la constelación de Hércules, desde donde parece irradiar el conjunto de meteoritos desprendidos pos la cola de escombros que genera el cometa 73P/Schwassmann-Wachmann 3, también conocido como SW3.
En esta ocasión, si el fenómeno ocurriese, se verifica el mejor pronóstico para poder observarlo a simple vista, ya que el cielo nocturno estará muy oscuro, dada la luna nueva, y la alta posición en el cielo de la constelación de Hércules.
Sin garantías
Bill Cooke, a cargo de la oficina de medio ambiente de meteoritos de la NASA en el Marshall Space Flight Center, precisó que si los escombros del cometa SW3 viajan a más de 321 kilómetros por hora, «entonces nada llegará a la Tierra y no habrá meteoros de este cometa«.
El cometa 73P/Schwassmann-Wachmann 3, que gira alrededor del sol cada 5,4 años, comenzó a fracturarse en 1995 y desde entonces los astrónomos han constatado que su órbita se ensucia cada vez más con escombros.
Desde dónde será visible
En caso de que esta verdadera tormenta de meteoritos se precipite sobre la Tierra, debería ser perfectamente visible desde todo el continente americano, tanto en su latitud Norte, como en su latitud Sur.
