La semana pasada en un debate de control político del MIRA en la Plenaria del Senado, quedó en evidencia las fallas estructurales del Seguro Obligatorio de Accidente de Tránsito (SOAT), entre las que están el alto costo, la evasión, la caracterización y el fraude al sistema, como lo advirtió el Senador Carlos Guevara, uno de los citantes de este debate, al lado de los senadores Ana Paola Holguín y Manuel Virgüez, quienes de todos modos reconocieron la decisión del Gobierno Nacional en reducir para algunos casos el 50 por ciento de la tarifa del SOAT.
La intervención de los citantes reveló una serie de aspectos que confirma aún más la crisis del SOAT, como fue la explicación de Guevara en que la tarifa de este seguro para motocicletas entre 100 y 200 cc, asciende a un total de 556 mil pesos, cuando el valor de la prima no sobre pasa los 283 mil pesos; y su contundente revelación de que 70 mil vehículos oficiales circulan sin el SOAT, y 76 mil más sin la obligatoria revisión técnico mecánica.
No menos grave la denuncia de la Senadora Ana Paola Holguín Agudelo, en que algunas IPS facturan servicios no prestados y hacen más exámenes de los necesarios, solo con el fin de cubrir el tope del seguro, sin dejar de mencionar la guerra entre ambulancias para recoger a una persona accidentada, ocasionando incluso choques entre estás y hasta ocasionar un segundo accidente al afectado; sumado a esto la afirmación del Senador Manuel Virgüez, en que distintas líneas de motocicletas que se comercializan en el País, no cumplen con los debidos estándares de seguridad, y que en consecuencia no circulan en ninguna parte del mundo.
Un proyecto de ley del Senador José Vicente Carreño Castro, que tendría como ponente al Senador Esteban Quintero en la Comisión VI, vendría a solucionar el alto costo del seguro y la creciente evasión, al establecer que el pago del mismo no solo sea anual, sino además semestral, trimestral o mensual, “dependiendo el uso personal, industrial o comercial del vehículo automotor”, porque muchos colombianos con diferentes roles o labores no lo utilizan durante todo el año -como es el caso del vehículo familiar- sino que se limita a un determinado período en el tiempo, y a todas luces es injusto que se le obligue a pagar por todo el año.
Un ejemplo es el vehículo automotor de la familia, que muchas veces solo se utiliza para salir de vez en cuando, en un festivo, en Semana Santa o en vacaciones de fin de año; o el caso de un profesional o un ejecutivo que utiliza su vehículo para casos muy puntuales, u otro también frecuente cuando un vehículo puede durar hasta cuatro meses en un taller para su reparación, sin dejar de contar que en los dos años de pandemia todos los vehículos –con algunas excepciones- no podían circular por el territorio nacional, pero a los usuarios si les tocó pagar puntualmente el costo del mismo a las aseguradoras.
El pago semestral, trimestral, bimestral y mensual del SOAT –como lo plantea la iniciativa de Carreño- no solo vendría a reducir la tarifa del seguro al no pagar todo el año, sino que además promovería la cultura de pago, porque si se tiene la posibilidad de pagar por cortos períodos de tiempo, el usuario prefiere pagar una tarifa menor y no arriesgarse a sufrir un accidente cuando circula su vehículo, lo que podríamos hablar en el mediano y largo plazo de un 0 por ciento en la evasión –ésta asciende a 2,2 billones de pesos- y a la vez se lograría disminuir las transferencias del Fondo del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (FONSAT), para cubrir los accidentes de vehículos no asegurados.
Este proyecto de ley sería el punto de partida para una reforma estructural, que igualmente se podría consignar en los lineamientos del entrante Plan Nacional de Desarrollo, buscando total transparencia y eficiencia en el funcionamiento del SOAT, consolidando una baja tarifa general de este seguro, eliminando un aspecto tan preocupante como la intermediación, y una contundente intervención para terminar de una vez por todas con los fraudes al sistema, que vendría a salvaguardar y fortalecer un seguro que ha salvado recientemente la vida de 5 millones de colombianos.
Coletilla: La evasión del SOAT y la no revisión técnico mecánica de más 140 mil vehículos oficiales –denunciado por el Senador Guevara en la Plenaria- exige una inmediata investigación disciplinaria a los funcionarios públicos responsables, como también la pertinente intervención de la Contraloría General de la República y la Fiscalía General de la Nación, porque a nadie le cabe en la cabeza que el mismo Estado promueva la evasión del SOAT, y por lo tanto la circulación ilegal e insegura de los vehículos oficiales, contribuyendo así en la alta siniestralidad vial en Colombia, estimada en un 13,3% por 100 mil habitantes.
Por Juan Carlos Niño, Asesor Legislativo – Escritor.
Bogotá D.C., domingo 27 de noviembre de 2022.