Después de más de 4 meses de espera marcados por intensas polémicas y protestas, finalmente se concretó el nombramiento de la nueva fiscal general de la nación.
En una jornada matutina tras la conclusión de la sala extraordinaria, la Corte Suprema de Justicia designó a Luz Adriana Camargo para ocupar este cargo. Con 18 votos a favor, dos más de los requeridos para conformar mayoría, Camargo se convirtió en la nueva fiscal.
El día estuvo marcado por un giro inesperado: la renuncia de última hora de Amelia Pérez, otra abogada que formaba parte de la terna. El presidente de la Corte, Gerson Chaverra, explicó que no tenía la autoridad para aceptar dicha dimisión y, por lo tanto, se procedió con la elección de la nueva fiscal en la sesión extraordinaria, que solo requirió una ronda de votación.
Luz Adriana Camargo, de 59 años y graduada en Derecho por la Universidad de la Sabana, cuenta con un extenso historial en el ámbito judicial. Entre 1992 y 2004, se desempeñó como fiscal delegada ante la Corte Suprema; posteriormente, entre 2014 y 2017, ocupó el cargo de jefa de investigación y litigio en la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala.
Su labor en investigaciones relacionadas con la parapolítica resultó en importantes logros, incluyendo el arresto de aproximadamente 50 congresistas. En 2018, Camargo fungió como consultora del equipo especializado en seguimiento, brindando asesoramiento a la Comisión de Derechos Humanos durante la supervisión de investigaciones penales en Colombia y Ecuador.
Cabe destacar que Camargo fue la última integrante de la terna presentada por el presidente Gustavo Petro, tras la salida de Amparo Cerón.